Era el año 2007. O 2008. No me acuerdo; caminando por Miraflores (tampoco me acuerdo por qué o para qué) iba planeando mi vida de esa forma pajera que a veces es tan irreal: ¿cómo será mi casa cuando pueda comprármela? ¿qué carro me compraré? etcétera. 

Si, ya sé. Sueños de consumo... pero bueno, en algún momento hay que hacer estos planes y qué mejor que hacer cuando das vueltas por el Marriot. 

Total que llegué a una cuadra de Alcanfores donde estaban construyendo un edificio de departamentos, fichón, de buenos acabados y tentador. Como de más joven era más conchudo me animé a entrar, con un sueldo de 600 soles mensuales a preguntar por el precio de un departamento de 74 metros cuadrados en pleno Miraflores. 

Pese a mi jean roto y mi pelo hasta casi la cintura, me tomaron muy en serio y me dieron el precio, para luego tomarme los datos. El precio: 89 000 dólares.

El número me quedó dando vueltas en la cabeza "89 mil" "89 mil" "89 mil","¡ajá! necesito llegar a trabajar de manera que pueda comprar un depa de 89 mil máximo, pero si consigo poder pagar 75 mil puedo comprar algo más pequeño o en otro lado".

Han pasado algunos años.

Actualmente estoy a puertas de mudarme con mi familia (esposa e hijo) a mi primer depa propio, ¿qué me falta? encontrarlo. Y paseando con ellos por Miraflores (Avenida Arequipa, cuadras antes de Angamos) se me ocurrió, evocando la conchudez de mis viejos tiempos, preguntar por un edificio de departamentos en construcción.

La conversación casi textual fue la siguiente: 

"Qué tal, estaba buscando departamentos..."
"Si señor ¿de cuántos dormitorios?"
"Ah estoy buscando de dos dormitorios"
"Uy que pena, ahorita solo me quedan de 3..."
"¿Y cuál es el costo del metro cuadrado?"
"Bueno, los de 98 metros cuadrados está 220 mil dólares"

STOP.

Este depa es un poco más grande, sí; ¿pero está en un sitio más monse y cuesta casi 3 veces el de hace unos años en Alcanfores?

Si. Los precios de las casas están por las nubes. Llegué a cumplir mi meta: puedo comprar un depa de 88 mil dólares, pero ahora ese depa no está en Miraflores, Está en Breña. 

No me lo tomen a mal, no es snobismo, yo soy del Rímac y no voy a meter toda la plata que me cuesta ganar, mucho menos a 25 años para seguir teniendo los mismos problemas de mala administración municipal, de seguridad, de tráfico, etc., que ya tengo.

Entonces, exagerando, me siento como el burro que corre con la zanahoria adelante y nunca la va a alcanzar. Suena desesperanzador, pero es que es un poco desesperanzador. Tendré que crecer más.

Algunas cosas para tirar al aire y ver con qué forma me regresan (cual boomerang): 

¿Cuál es el criterio para poner precio a las cosas?
Hace no mucho leí que era una fórmula tipo: fijemos el sueldo mínimo con lo mínimo que se necesita para vivir y los precios de aquello con qué se vive los ponemos en base a los mayores sueldos del mercado, y luego dejemos que la oferta y la demanda determine todo lo del medio. 

Esto quiere decir que yo he crecido profesionalmente, pero gracias a la bonanza económica del país, en donde alguien más gana 18 000 soles mensuales, yo tengo que pagar tres veces más por algo. 

¿Y cómo se define el ingreso?
La señora del edificio de Miraflores me dijo: Solo tienes que sustentar un ingreso CONYUGAL de 15 000 soles. Se asume que una familia consta de dos ingresos. La lucha por la igualdad ha demostrado un resultado relativamente predecible: la igualdad genérica en el mundo profesional se ha logrado volviendo a ambos miembros a cargo de una familia en igualmente exitosos o igualmente cagados.

¿Y qué nos queda?
Alquilar, hacerla larga, tratar de dar tiempo a seguir creciendo a punta del esfuerzo de mi familia, y solamente rogar porque cuando pueda comprar algo de 150 mil dolares, no esté 500 mil dolares.

Consejo de mi padre:

"Ten paciencia, no te desesperes, igual falta poco para que se acabe el mundo..."